Hace unos años un chico dejó un comentario en un vídeo de youtube. Podéis ver el comentario original aquí.
Aunque básicamente, lo que contaba el chico es que cuando tenía cuatro años su padre le compró la XBox. Padre e hijo pasaron montones de momentos divertidos juntos jugando a la consola, hasta que éste murió cuando él tenía seis años. Estuvo sin volver a usarla durante diez años. Ellos solían jugar a un juego de carreras de coches llamado Rally Sports Challenge. Cuando por fin volvió a sacar la consola y jugó, se dio cuenta de que apareció, literalmente, un fantasma. En este juego, la vuelta más rápida registrada se queda grabada como tal. Mientras jugaba, a él le apareció el coche fantasma de su padre, quien había conseguido un récord cuando competían siendo él pequeño. Así que el chico jugó, jugó y jugó para intentar batir el récord del coche fantasma de su padre. Un día lo consiguió, adelantó al coche y justo cuando estuvo a punto de ganarle, paró su coche enfrente de la línea de meta y perdió, para asegurarse de que el coche fantasma de su padre no desapareciera.
Realmente no se sabe si la historia es real o no, ya que quien dejó el comentario en youtube nunca volvió a dar señales de vida. Francamente, yo quiero creer que sí.
A partir de ese comentario, que dio la vuelta a internet, John Wikstrom ha creado un corto, muy breve pero impactante, para reproducirlo.
Me parece precioso. Una historia sencilla, nostálgica y fascinante.
Espero que te guste.
Un besico.
PD: Gracias M por descubrirmelo 🙂
4 Comments
Me ha recordado a esta otra historia :_)
http://www.pixfans.com/una-historia-emotiva-tras-un-videojuego/
Me lo ha comentado Fran justo esta mañana.
Que penica.
Sencillo pero precioso… casi me caen las lágrimas!!! 🙂
Me alegra mucho que te haya gustado 🙂
Gracias por pasarte.
Un beso enorme